domingo, 24 de abril de 2016

Marcha por los alrededores de Morata de Tajuña


Más de 70 insistentes luchadores por la conservación del valle del Tajuña se han dado cita en Morata para ir creando poso en las localidades de la comarca. Vamos poco a poco, sin prisa y sin pausa, pisando el terreno y conociendo su riqueza. Hay que dejarnos ver y que hablen de nosotros; que se genere debate, que les suenen nuestros nombres y lo que queremos; luego vendrá el trabajo de exponer nuestras reivindicaciones, de dar batalla en otros escenarios y con otras gentes.

Convocados por la santa hermandad gramarbeña un buen puñado de niñas, mayores, perros, desquiciados, atolondrados, sabios, maniáticos, chillones, coherentes, currantes, arancetanos, despistados, alborotadores, intrigantes, valdemoreños, zarrapastrosos, quejicas, laguneros, incisivos, mamelucos, ... (pon lo que quieras si no te ves reflejado) se han dado un buen paseo por el valle, entre cortados yesíferos, por el borde de la vega del río. El día no podía ser más espectacular, con el campo casi en su mayor esplendor. Los carraspiques asomaban su blancura por los cortados recordando al personal que ya es primavera en El Corte Inglés.

La Bicha Simón enseguida se ha venido arriba, le ha entrado una vena mesiánica y, como si estuviera reeditando el sermón de la montaña, nos ha contado a todos los presentes los objetivos de estas marchas. Hay que dar la lata, seguir dando la lata y cuando terminemos, volver a dar la lata. Esos son sus principios. Un rayo de sol a caído, abriéndose paso entre las nubes, sobre su cabeza. Sus fans de ARBA gritaban y genuflexionaban, ante la mirada atónita del resto.
El nuevo mesías

El día discurría tranquilo, demasiado para lo que suele ser normal. Una calma sospechosa se cernía sobre el caminar constante de los marchistas. Las malas lenguas decían que había una mayor paz y sosiego porque se notaba que no había venido el Tajuñas. Un plantucho se marchitó nada más oir estas maldades.
Día tranquilo, de momento

El Truchas es un hombre sensato y bien apañado. Hombre de estrictos hábitos. Si cuando son las 13,10 minutos no ha comido, se pone muy nervioso y hay que darle una pastilla. Casualmente no llevábamos su dosis, por lo que a tal hora nos dispusimos a comer allí mismo bajo unos olivos. En las nubes del cielo se dibujó algo parecido a un pez salvaje.

Bea La Doctora es una mujer de muy recto proceder. Debío tener un antepasado alemán porque la improvisación es algo que no va con ella. Darío el Orco debío tener un antepasado íbero y tarteso, porque si no hay improvisación adelgaza diez kilos. El pulso se veía venir de lejos "¿Queréis aventura o queréis aburrimiento?". La batalla la tenía perdida la Doctora desde el primer minuto.

Y cuando se elige aventura ya se sabe lo que hay: bajar barrancos y cruzar sembrados. Menos mal que somos gentes de bien y que no nos importa andar 8 kilómetros de más para ver una laguna que no tiene ni gota de agua.
La aventura es lo que tiene...

Caminante ¿no hay camino?

Pero para ser justos hay que decir que los barrancos por los que hemos pasado encierran unos rincones espectaculares de vegetación mediterránea y propia de las zonas yesosas. Grandes encinas, tupidas coscojas, incipientes quejigos en las umbrías, por encima de un cortejo de romeros, heliantemos, espinos, aladiernos y demás plantajos y endemismos.

Tras 20 kilómetros de ruta, bajo un sol de justicia, más secos que la mojama..., hemos dado con nuestras santas posaderas en el bar. ¡Alabado sea el Tajuña!



El Andarríos no trajo la pastilla del Truchas. Todos a comer

Faceta mesiánica


El Orco explícándose sin subtítulos



Fritillaria lusitanica Meleagria

La supuesta laguna

Las dos más sensatas

Trucha salvaGe oeh oeh oeh







martes, 19 de abril de 2016

HOMENAJE A NINES


(Texto leído por ARBA, El Soto, GRAMA y Jarama Vivo en el homenaje a Mª Ángeles Nieto, NINES, Coordinadora de Ecologistas en Acción de la Comunidad de Madrid, el 16 de abril en Madrid)

El movimiento ecologista madrileño tiene una deuda de reconocimiento con María Angeles Nieto “Nines”, Coordinadora de Ecologistas en Acción de la Comunidad de Madrid. Nines, la mayor referente del movimiento ecologista regional. 

Quienes llevamos años trabajando por defender el patrimonio natural, los recursos y el respeto por las más elementales leyes de protección, sabemos del largo y difícil camino recorrido y del creciente número de sinsabores y obstáculos que se interponen en la lucha ecologista. Trabajar de forma activa y continuada por el medio ambiente en la región madrileña es un trabajo difícil, ingrato, que requiere de sacrificios personales y que carece del brillo y el reconocimiento que otras actividades públicas tienen.

Por si esto fuera poco, en el ecologismo solemos ser parcos en las victorias. Las pocas alegrías que se consiguen se disfrutan casi en la intimidad (como las hemorroides): impedir un caso del urbanismo salvaje, parar un megaproyecto especulativo, conseguir que se ponga en marcha un plan de protección de fauna o flora, frenar una gravera peligrosa, ayudar a derogar una ley injusta..., son situaciones que de vez en cuando nos han ocurrido y en casi todas esas ocasiones ha estado presente Nines, y lo ha hecho siempre con humildad y huyendo del protagonismo. 

Quienes trabajamos con Nines desde hace casi 15 años, sabemos mucho de su dedicación y de su solvencia; de su capacidad de trabajo y de su sacrificio casi extremos; de su entrega y su tenacidad sin límites; de su sabiduría y sus grandes conocimientos en prácticamente todos los ámbitos del ecologismo (“cráneo privilegiado” en palabras de Valle Inclán)...

Junto a Nines hemos aprendido (y demostrado con ella) que la lucha ecologista requiere de rigor máximo en los planteamientos; hemos aprendido que para tener opciones de victoria hace falta sacrificio, horas y horas de trabajo, conocer bien a fondo los temas, esfuerzos en coordinarse con gente y colectivos ...; hemos aprendido que no hay que tener miedo a salir a la calle, a denunciar, a convencer, a exigir, a protestar, a pelear y a ser inflexibles contra la indecencia, la destrucción, la corrupción y la mediocridad... 

Del esfuerzo personal de Nines han surgido muchos de los logros de Ecologistas en Acción en la Comunidad de Madrid y, sin duda, el nombre de esta organización es más grande porque ha contado con ella como ultra-curranta sin descanso en estos años. 

Queremos valorar el escenario de trabajo coordinado que ha surgido entre los grupos ecologistas madrileños que formamos los aquí presentes junto con Ecologistas en Acción, donde Nines ha sido una integrante esencial. En todos estos años hemos hecho decenas y decenas de alegaciones, de marchas, de comunicados de prensa, de acciones, de reuniones, de manifiestos, de protestas, de charlas...; nos hemos disfrazado de curas, de obispos, de viejas, de sobres, de bañistas, de cornudos, de edificios, de consejeros de medio ambiente, de ataúdes... ; Pero si hay que destacar algo de esta coordinación es la confianza que hemos tenido entre todos, el respeto al trabajo de los demás, el gran compañerismo y, especialmente, que jamás (jamás) ha surgido el más mínimo problema o conflicto entre los cinco colectivos (el “quinteto”, es decir ARBA, El Soto, Ecologistas en Acción, GRAMA y Jarama Vivo).

Si, como decía Bertold Brench, quienes luchan siempre en cada momento de la vida, son las personas imprescindibles, Nines sin duda lo es. Es de justicia reconocer que sin su constante trabajo contra proyectos, planes y leyes surgidas de los gobiernos regionales del Partido Popular o de los Ayuntamientos de todo color político, las cosas hoy en día serían mucho peores. Quizás su labor haya sido una de las más serias oposiciones con las que se han encontrado los gobiernos de Esperanza Aguirre e Ignacio González entre todos los ámbitos. Gracias a Nines se han echado para atrás planes de urbanismo, se han parado urbanizaciones leyes, planes de gestión infames, proyectos sinsentido, se han destapado chorizadas, barrabasadas y corruptelas... y lo que nos queda por ver todavía.

Los colectivos ecologistas ARBA, El Soto, GRAMA y Jarama Vivo creemos que hacía tiempo que había que reconocer la labor de Nines y agradecer su dedicación. Es hora de hacerlo cuando todavía estamos en activo y, más o menos, con todas nuestras capacidades. Esperamos que sea este acto de hoy una ayuda para seguir adelante con mayor ilusión y ganas. 

Para nuestros colectivos (y creo que hablamos en boca de todos tus amigos aquí presentes) es un honor haber compartido tantos años y tenerte como compañera y amiga. Tu lucha es un ejemplo para todos nosotros. Nines, muchas gracias por todo. 


¡¡¡Trucha salvaGe, oeh, oeh, oeh!!!


The Gramers and the Nines



"Hoja de roble". Recuerdo elaborado por Manu Muñoz y regalado por los colectivos a Nines


Una pareja "10"




domingo, 10 de abril de 2016

En defensa de los caminos que unen pueblos


El Cordel de los Manchegos es una vía pecuaria que unía, por la vega del Jarama, los municipios de Titulcia con San Martín de la Vega y con Ciempozuelos. Durante cientos de años ha sido utilizado para trasladar el ganado e, igualmente, para unir a las gentes de estas poblaciones. Los tiempos modernos trajeron consigo nuevas formas de movilidad y coches y carreteras sustituyeron a vehículos de tración animal y a caminos públicos. A partir de este momento, éstos entraron en desuso y muchos de ellos fueron ocupados por todo el que pasaba por allí. A pesar de ser bienes inalienables, inembargables e imprescriptibles, de titularidad pública, miles de kilómetros de estas vías se han perdido en los últimos años en manos de delincuentes, en toda la Región.

El caso del Cordel de los Manchegos no iba a ser menos. En poco tiempo, la Gravera del Jarama, situada en la finca de la laguna de las Arriadas, en Ciempozuelos, sustrajo un buen cacho de esta vía pública. A pesar del flagrante delito, la Administración regional, en lugar de hacerles restituir el daño y abrir al público el trazado original, ha propuesto un trazado alternativo por una vía intransitable que discurre por el borde de la finca, entre caces de riego y junto a una carretera. En la práctica, para ir de Ciempozuelos o San Martín de la Vega a Titulcia, en bicicleta o andando, es imposible hacerlo si no se hace por carretera.
Gravera del Jarama. No solo ocupan el Cordel de los Manchegos sino también zonas donde no se permite la actividad minera.

Algo similar ha ocurrido con algunos agricultores, que conociendo la pasividad administrativa, han decidido ampliar su zona de cultivo usando el cordel. Para quien quiera recorrer la vía pecuaria por su trazado original, el resultado no es más que una especie de carrera de obstáculos, atravesando caces de riego, sembrados, vallados... Hasta las narices de esta situación, decenas de vecinos de los tres municipios han realizado varias marchas que, por segundo año, han confluido en la Huerta La Madre Vieja.
Cacera y cultivo en el trazado del Cordel de los Manchegos

Desde San Martín de la Vega ha salido lo más granado del movimiento ecologista local, aunque con ausencias lloradas de la casta como el Truchas y la Bicha. Durante el recorrido hemos sido ilustrados por el Abejorro de Gózquez de las singularidades de la enfermedad de la grafiosis en los olmos autóctonos. Un hongo foráneo, introducido en el árbol por un escarabajo barrenador, le produce al árbol un colapso en sus entrañas que, en pocos años, termina con él.

Junto a la depuradora de San Martín de la Vega, el Doctor Tajuñas ha disertado sobre la necesidad de adecuar la protección del territorio hacia las zonas de cuestas y yesos, ricas en endemismos botánicos, pero olvidadas en la gestión del Parque Regional. El Andarríos, metiendo baza, nos recordaba que, en coherencia con los objetivos del Parque, la agricultura de la zona debería adecuarse hacia modelos más sostenibles en el empleo de agua y fitosanitarios. La Jefa Ecologista no ha dicho nada, quizás porque estuviera pensando en su peluquero.
Junto a la depuradora
Un poco más allá y también más acá, hemos podido ver manchas amarillas entre las hierbas de los bordes de los cultivos, los bordes del camino e incluso en el interior de los canales de riego. Numerosos desaprensivos e inconscientes han fumigado con herbicida sin importarles los efectos que pudiera tener esto sobre el agua o sobre lo que están cultivando.

Canal de riego fumigado

Para llegar a la Huerta Vieja no había más que saltar una cacera, atravesar un cultivo, subir un terraplén... Menos mal que entre los que allí nos congregamos no había gentes débiles de espíritu ni sensibleros. Solo había gente decidida y con voluntad inquebrantable. En un plis estábamos en el lugar de encuentro con las otras marchas, abrazándonos y dando vítores por vernos los getuños. Comiendo un bocadillo de caballa (por haber saltado la valla), escuchamos a la representante de la plataforma Somos Vegas diciendo unas cuantas verdades sobre la situación del Cordel. Si esto no cambia, en no mucho tiempo, nos daremos cita de nuevo allí. (A Bea se la vio rogar a sus dioses domésticos para que esto no ocurra).

Sembrado ocupando el Cordel de los Manchegos


Ya solo quedaba volver. Decididos nos fuimos todos a Los Leones. Un grupo de chinos nos preguntaron por un señor flaco, enjuto, barbudo y bien hablado que en otras ocasiones parece ser que ha ido a ese bar. No supimos contestar.

Quien desee saber qué se habló y sucedió en el bar... que hubiera venido.
¡Trucha salvaGe, oeh, oeh, oeh!
En la Huerta Vieja, escuchando la lectura del comunicado

Darío (el de abajo) en su casa natal
 
La Jefa y el Abejorro

16 de abril de 2016. Homenaje a Nines Nieto. Compañera ecologista